Criterios de dictaminación

Política y Cultura es una revista científica arbitrada bajo el modelo “doble ciego” lo cual supone que los árbitros no conocen la identidad de los autores y viceversa[1]. El proceso de evaluación de los artículos propuestos se realiza en dos etapas siguiendo este modelo en todos los casos.

Predicamen: Este es realizado por la Comisión Coordinadora y consta de verificar que trabajo cumpla con los criterios del alcance y objetivo de la revista, así como determinar que éste se inserte dentro de la temática principal y alguna de las líneas propuetas para cada número.

Otros criterios considerados son: a) la pertinencia y adecuación temática de acuerdo con los términos de la convocatoria y la concepción global que dio lugar a ella; b) la mejor integración posible en el conjunto, sobre la base de lograr un panorama multidisciplinario y diversificado del objetivo general propuesto, y c) la aportación de elementos realmente novedosos y originales al análisis de la problemática (resultados, propuestas metodológicas, enfoques, etcétera).

Dictamen: La segunda etapa se constituye en la evaluación por pares, en la cual todos los trabajos son presentados a expertos en la materia, tanto nacionales como internacionales, guardando el debido anonimato, quienes emiten un dictamen razonado, amplio y cuidadoso sobre el trabajo en cuestión, determinando su aprobación o rechazo. En casos de controversia, la Comisión de Número tiene el voto definitivo acerca del estatus final del trabajo. Entre los criterios más relevantes a evaluar se encuentran:

Apegarse a las líneas temáticas de la convocatoria (excepto los de matemáticas).
Tratarse de un tema relevante y de interés para la disciplina, además de contener algún aporte científico, enfoque novedoso o tratamiento interesante.
Hacer uso coherente del instrumental teórico y metodológico.
Emplear bibliografía pertinente y actualizada.
Existir correspondencia entre los datos empíricos y su utilización.
De incluir cuadros o gráficos, deberán ser adecuados al tema.
Circunscribirse a una extensión de 20-30 cuartillas, a un espacio y medio.
Tener buena redacción y carecer de faltas de ortografía.
El título deberá ser claro y breve (no más de 15 palabras) y los subtítulos deberán tener carácter aclaratorio.
Respetar los criterios de pie de página y bibliográficos.